A los pies del Santísimo Sacramento, aquí en Bolonia, llevamos el dolor y las necesidades de nuestra tierra golpeada por las catástrofes naturales.
Que María, que es Madre, proteja bajo su manto a sus hijos necesitados de consuelo y esperanza.
A los pies del Santísimo Sacramento, aquí en Bolonia, llevamos el dolor y las necesidades de nuestra tierra golpeada por las catástrofes naturales.
Que María, que es Madre, proteja bajo su manto a sus hijos necesitados de consuelo y esperanza.