Ante la responsabilidad y la delicada misión que se nos ha confiado: “Reorganizar nuestra vida como CFMSS en estilo sinodal”, es siempre agradable un “soplo” del exterior que nos confirme: “El camino es por ahí…”. Es lo que ha hecho Fr. Massimo Fusarelli, Ministro general OFM, invitado a dirigirnos unas palabras en este acontecimiento que celebramos.

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Fray Massimo se comunicó vía On line con nuestra Asamblea Capitular. Los puntos abordados sirvieron para confirmarnos que el Espíritu Santo es el protagonista de todas nuestras decisiones: “Reorganizar nuestra vida…” a partir del Carisma, escuchando al Espíritu que no lleva dónde quiere y cómo quiere.

El Carisma es más grande que nosotras, nos recordó el P. Massimo. Nos advirtió que no perdamos el foco de la “reorganización”, corremos el peligro de distraernos con demasiados discursos y argumentos. Centrarnos en el objetivo principal: “REORGANIZAR AL ESTILO SINODAL”, que requiere mucho discernimiento por parte de las capitulares, dado que la explosión de la diversidad, propia del momento histórico que estamos viviendo, con innovaciones científicas y tecnológicas, cambios en los ámbitos de la economía y la política, así como transformaciones en las estructuras y el comportamiento social- exige apertura a las diferencias, y no podemos permitirnos quedar como estamos.

Por eso, nos ha advertido que para alcanzar la meta que queremos, deben movilizarnos dos preguntas: “¿Qué hay en nuestra vida que necesita ser revisado?”¿Somos capaces de leer los signos de los tiempos con nuestro Carisma? Cada época nos hace descubrir algo, y el carisma, siendo un don del Espíritu, es dinámico. Por eso es fundamental preguntarnos: ¿cómo podemos vivir hoy el carisma respondiendo a los signos de los tiempos? En la reorganización puede haber varias facetas para tener en consideración. Porque correremos el riesgo de “cambiarlo todo para no cambiar nada”.

Considerando que el Espíritu sopla donde quiere, debemos tener la capacidad de reconocer la fuerza del Espíritu, en cada hermana, en la cultura y en cada realidad.

Fray Massimo nos ha invitado a ser dinámicamente fieles al Carisma, y ha subrayado que para nosotras, del carisma franciscano y clariano, el Evangelio es fundamental. “Nuestros fundadores han partido del Evangelio y de los pobres. No podemos perder de vista esto”.

Fray Massimo ha concluido su intervención deseando la Luz y la Fuerza del Espíritu a para todas las capitulares, bendiciéndonos con la Bendición de San Francisco.